Más de tres cuartos del aforo se dieron cita en el Palio de Istres para asitir a la alternativa de Carlos Olsina, que se convertía en el matador galo número 71 de manos de José María Manzanares y con Paco Ureña de testigo. En chiqueros, una corrida de toros de Jandilla.
Ovación para la gran faena de Carlos Olsina, que pincha al toro de su alternativa
Bien hecho estaba el abreplaza, pero duró poco en la arena al partirse un pitón contra un burladero y ordenarse la salida del sobrero. Lucieron las verónicas de Olsina con el largo toro, que impuso su estampa en el Palio y tomó un buen primer puyazo. Doblándose con suavidad se desempeñó el nuevo matador tras la ceremonia, siempre con mucha suavidad. Aprovechó el motor y el recorrido del buen Jandilla para ligar sin mucha exigencia en una primera parte, pero fue una tanda al natural la que hizo presente el toreo para que cambiase la segunda parte de la faena. Redondos por la espalda, derechazos de mucho mando, demostrando temple y naturalidad. Remató la faena con ceñidas bernadinas, pero también con un fallo a espadas que le hizo perder todo premio. Ovación con saludos tras aviso.
Palmas para Manzanares con el blando segundo
El segundo era bajo pero tenía remate para una plaza de tercera. Unas templadas verónicas fueron el saludo de Manzanares, que remató con una gran media tomada muy de frente. Sólo un puyazo se llevó el animal, que perdió las manos en el inicio de faena de Josemari. Jugó entonces el alicantino con las distancias para sujetar al animal a base de inercia y temple. Lo mató de un espadazo tras pincharlo y escuchó palmas.
La espada arruina el posible premio de Paco Ureña con el tercero
Ureña tuvo el gesto de brindar la muerte del tercero a Bernard Marsella, empresario de la plaza, que había perdido a sus padres días atrás. Muy suave fue el inicio de Ureña, siempre metido en la faena y con cierta clase en tres tandas diestras que aromatizó con bonitos cambios de mano y pases de pecho muy profundos, siempre con el sello de la mano baja. Lo peor llegó con la espada, puesto que los pinchazos cobrados le hicieron perder el premio. Ovación.
Ovación para Manzanares con el cuarto, que lo voltea aparatosamente
El cuarto fue un toro negro de muy buena hechura que vino, sin embargo, muy por dentro en el recibo capotero de Josemari. Tuvo movilidad el animal, pero le faltaba la humillación necesaria para que la faena tomase vuelo desde las primeras tandas. Lo mejor llegó a diestras, con la acostumbrada facilidad de Manzanares ante un toro que se negó en redondo a embestir por el pitón izquierdo. Pinchó cuatro veces la faena, y en uno de los intentos fue volteado aparatosamente sin consecuencias.
El esfuerzo de Ureña con el encastado quinto queda en el fallo a espadas
Al quinto lo saludó Ureña con delantales, pero no terminó de definirse de salida. Recibió un sólo puyazo y dio problemas a las cuadrillas, cortando los terrenos en banderillas. Pero en seguida comprobó Paco que estaba encastado el animal, en tres series de umucha transmisión con la mano diestra. Se dejó también el animal al natural, pero sin tener el mismo ritmo ni la misma profundidad. Remató faena el de Lorca con unos redondos por la espalda muy largos, pero también con un fallo a espadas que emborronó todo lo ejecutado. Silencio tras aviso.
Carlos Olsina y su entrega abren la puerta grande el día de su alternativa
Al sexto, el toro más astifino de la tarde, lo recibió Carlos Olsina con dos largas cambiadas para levantarse después en verónicas de mucha transmisión, rematadas con otra larga de rodillas que llegó mucho al tendido. Se arrancaba de largo el de Jandilla, pero le faltaba un galope más franco y algo más de humillación en su embestida, pero le realizó buenas tandas por ambos pitones en una faena de gran entrega que remató con un espadazo fulminante y el paseo de dos orejas.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de El Palio, Istres, Francia. Segunda de abono, corrida de toros. Tres cuartos de plaza.
Toros de Jandilla y Vegahermosa, bien presentados. Con movilidad y fondo el buen primero; de manejable pitón derecho el segundo; de fuelle justo y noble condición el tercero; con más movilidadque humillación el cuarto; encastado y exigente el quinto;
José María Manzanares: palmas y ovación.
Paco Ureña: ovación y silencio tras aviso.
Carlos Olsina (que toma la alternativa): ovación tras aviso y dos orejas.
FOTOGALERÍA: MURIEL HAAZ
