Uceda Leal, Morante de la Puebla y Ángel Téllez trenzaban este sábado el paseíllo en uno de los carteles más señalados de la Feria de Otoño de Madrid frente a un encierro de El Puerto de San Lorenzo. A las seis de la tarde arrancaba el paseíllo.
La suprema torería de Uceda, que se ‘picó’ con Morante en quites, da una vuelta tras petición con el primero
Con un ramillete de cadenciosas verónicas saludó Uceda Leal al serio primero José Antonio, sellando el poso que la tarde podría aventurar. Y respondió Morante por verónicas tan cadenciosas como llenas de ritmo tras las varas de Pepe Aguado. Una locura la segunda y la media a pies juntos. La plaza ya volcada. Como en la respuesta por chicuelinas de Uceda con el animal humillando, tan torera cada una que explotó de clasicismo el remate de José Ignacio. La suma limpieza en el detalle de llevarse el toro al caballo, todo con el toque ecuánime, antes de una primera serie por la diestra en la que humilló el de El Puerto. Una obra llena de perlas toreras y en la que tuvo que navegar Uceda con la contraquerencia para evitarle vicios mansurrones al Atanasio. El final de obra, con torerísimos doblones, preludió a una estocada casi entera que lo tumbó. Y arrastraron al buen toro sin que el palco concediese el premio. Vuelta al ruedo.
Morante despacha pronto al manso segundo
Muy frío de salida otro serio segundo que embistió bruto a las telas de Morante. Y tampoco hizo cosas buenas ni en las desacertadas varas de Cristóbal Cruz ni en el capote de Juan José Trujillo, dando un feo tornillazo a mitad de viaje. Bien Sánchez Araujo en los pares. Sujetó en el centro del anillo al mansurrón toro pero lo despachó pronto. No acertó con el acero. Silencio.
Intermitente obra de Téllez al buen tercero de El Puerto
Pareció mansear el tercero en las verónicas de Ángel Téllez, que templó el trazo, y en el posterior quite por chicuelinas. Y tras los buenos pares de sus hombres de plata, se puso con la muleta a pies juntos en el centro del ruedo -quizá domeñándolo por abajo se hubiese comportado de otra forma y hubiese sucumbido al poder del matador-, pero no tomó vuelo hasta una serie por derechazos de buen son. Fue ahí cuando le vio el aire el toledano a la raza atanasia del buen animal, que respondió a la distancia corta que le planteó Téllez. Aunque en estructura marró, no en entrega el joven, porque aunque le faltó cierto ajuste por momentos siempre quiso cruzarse y agradar. Pero ese paso más se echó en falta. Tras las manoletinas finales, pinchó al de El Puerto. Silencio tras dos avisos.
Una estocada de libro rubrica los detalles toreros de Uceda al sobrero cuarto
Fue para atrás tras partirse la parte superior del pitón contra un burladero el cuarto, siendo sustituido por un toro de José Vázquez. Y le sopló verónicas con la planta erguida antes de que mansease el toro tras salir de las varas. Aplomado y sin transmisión el toro, solamente pudo dejar perlas de su clásico concepto el de Usera. La estocada, de libro, tumbó junto a un descabello certero al animal. Ovación.
Morante cierra su año con un silencio ante el quinto
Lidiador y domeñando al frío de salida quinto fue el recibo de Morante, cantando Madrid los lances lidiadores de José Antonio. Se desmonteraron Sánchez Araujo por sus pares. Con el cartucho de pescao inició la faena a un toro que se quedaba cada vez más corto y no humillaba. No acertó con el acero. Silencio.
Silenciado Téllez con el deslucido sexto
No se definió en los primeros tercios un sexto que al final fue deslucido y con el que no pudo más que intentarlo sin lucimiento Téllez. Silenciado tras despenarlo.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de Las Ventas. Quinta de la Feria de Otoño. Corrida de toros. Casi lleno.
Toros de El Puerto de San Lorenzo y uno, el cuarto bis, de José Vázquez. Con humillación y entrega el buen primero; manso el segundo, que daba un tornillazo a mitad de viaje; enrazado y con calidad en e viaje el tercero; aplomado el cuarto; de díscolo viaje el complejo quinto; deslucido y a menos el sexto.
Uceda Leal, vuelta y ovación.
Morante de la Puebla, silencio y silencio.
Ángel Téllez, silencio tras dos avisos y silencio.
FOTOGALERÍA: LUIS SÁNCHEZ OLMEDO