Roca Rey hacía, este 24 de agosto, el primero de sus dos paseíllos en las Corridas Generales de Bilbao, una tarde en la que se lidiaba un encierro de Puerto de San Lorenzo -al completo- en el Coso de Vista Alegre. Morante de la Puebla abría plaza y Manuel Escribano le seguía en suerte.
Morante abrevia con el medido de fuerzas primero
’Granero’ llevaba por nombre, el primero de la tarde, un toro largo de 584 kg. Ya de capa evidenció el animal que no iba a querer tomar los engaños por abajo, impidiendo el saludo capotero del sevillano, aunque este dejara dos verónicas de categoría. Morante decidió no brindar una faena donde nunca apretó a un animal muy justo de fuerzas, un toro al que dejó muletazos sueltos a diestra pero sin ligazón. No lo vio claro con la izquierda, por ahí el animal acortaba más el viaje. No se dio coba y se fue a por la espada. Saliéndose de la suerte dejo un pinchazo hondo desprendido siendo finalmente pitado.
Escribano le corta una oreja de peso al interesante segundo
‘Cubilon’ llevaba por nombre el primero del lote de Manuel Escribano, un toro serio y bajo de 534 kg de peso. A portagayola se fue Manuel para recibir al animal. Varias fueron las largas de rodilla que le recetó al astado en el tercio antes de lancearlo por verónicas. Se aplaudió a Juan Francisco Peña por dos puyazos en muy buen sitio antes de llegar a un tercio de banderillas donde siempre se dejó venir el animal, la última de ellas al quiebro. Brindó al respetable antes de comenzar por estatuarios en la boca de riego sin enmendar un ápice las zapatillas. Tras una serie en redondo de mano baja abrochada por un buen pasé de pecho, continuó a diestras con otra tanda marcada por el temple. El animal del Puerto embestía con celo y repetición a la muleta del sevillano, esa que lo llevó imantado en muletazos muy jaleados por la parroquia bilbaína. Por el lado izquierdo no fue igual, quedándose más cortito y calamocheando. Volvió a diestras para dejar muletazos ligados de mano baja, por ahí Manuel consiguió reducir la embestida de un animal con gran temple y calidad. Tras una estocada hasta las cintas un poco trasera, paseó una oreja de mucho peso, no concediendo Matías, la segunda.
Roca Rey pasea una oreja de otro buen toro del Puerto
’Cubano’ llevaba por nombre el tercero del festejo, un toro de 572 kg que no permitió el lucimiento de capa de Andrés Roca Rey, un astado que siempre embistió con la cara alta y el cual no fue castigado excesivamente en varas. De negro y oro vestía un Roca Rey que brindó al público su faena. Por ayudados por alto comenzó su obra, la cual complementaría con dos pases por la espalda. Toreo de mano baja con la diestra en redondo con pases de pecho finales de pitón a rabo. Poco a poco el animal fue descolgando y pese a no humillar del toro sí lo hizo más y mejor que en el capote. El público andaba entregado al peruano, el cual supo imantar en la muleta al toro salmantino. Por el lado izquierdo dejó naturales de calidad llevándoselo detrás de la cadera y pases de pecho hasta el final. Enloqueció la plaza con un enorme trincherazo que lo dejó colocado para proseguir la serie. A derechas el animal siempre tendió a vencerse por dentro, algo que no importó al peruano. La plaza rugía con Andrés al meterse este en los terrenos del animal. Pases de nuevo por la espalda haciendo alarde de su enorme valor. Tras una gran estocada paseó una justa oreja de un animal aplaudido en el arrastre.
Morante deja pasajes de gran belleza ante un cuarto que acabó rajándose
’Langosto’ de 590 kg de peso, fue el segundo del lote de Morante, un espada que pudo soltarse de capa y lancear a la verónica con gran cadencia. El sevillano toreó con las palmas de las manos a un animal que la tomó con cierta calidad. La media fue a cámara lenta. Midió Iturralde al animal antes de que Morante le soplara un bellísimo quite por chicuelinas ante un animal con tendencia a salirse suelto. Ya con la muleta dejó muletazos de gran suavidad, dos tandas de toreo en redondo despaciosas e intentando reducir la embestida del animal. Cuando la faena tomaba mayor vuelo, el animal se rajó, imposibilitando así una faena ligada. Una labor donde la mano izquierda fue algo testimonial al estar más pendiente el animal de las tablas que de la muleta. Lo mató de algo más de media en el sitio y un golpe de verduguillo. Fuerte ovación -desde dentro del burladero- para un Morante de la Puebla que dejó pasajes de gran belleza y estética ante un toro con nobleza y temple hasta que se rajó.
Escribano por encima de un astado que se apagó pronto
’Carretillero’ de nombre y de 574 kg, fue el quinto de la tarde, otro animal hondo y largo de la divisa salmantina. Al igual que en el segundo, Manuel Escribano se fue a portagayola a recibir a un animal que no le hizo caso de salida, dejando posteriormente una larga cambiada previa a un ramillete de verónicas de calidad abrochada con una buena media. Dejó buenos pares Manuel, el último sentado en el estribo y haciéndole un quiebro pegado a las tablas, este último muy jaleado por el respetable. Brindó su faena a un niño con cáncer, comenzando el trasteo pasándoselo por detrás en la boca de riego. Continuó con una serie en redondo muy ligada y de mano baja abrochada por un muy buen pase de pecho. Dos tandas del mismo palo dejó antes de tomar la izquierda. Por ahí se quedó siempre más corto, soltando la cara y metiéndose muy por dentro. Probó de nuevo a derechas antes de acortar la faena ante un toro que duró poquito. Tras una estocada hasta las cintas, saludó una ovación desde el tercio como premio a su seria actuación.
Roca Rey se va de vacío ante otro animal de rajada condición
’Cigarro’ de 548 kg cerraba la tarde de hoy en Bilbao, un toro que tampoco dejó estirarse de capa al torero peruano. Un toro que siempre embistió a saltitos y con las manos por delante. En el centro del ruedo con la diestra comenzó faena Roca Rey, pero el toro buscaba refugio en tablas, rajado este del Puerto al que Roca lo volvió a llevar al centro del ruedo ofreciéndole la muleta a diestras, dejándole la pañosa en la cara para intentar robarle derechazos de calidad, pero el animal siempre salía desatendido. Muy rajado un astado que imposibilitó una faena ligada. Muletazos de mucho mérito aguantando una embestida sin entrega, algo que caló en el respetable. Sufrió un desarme, pero volvió a la cara del toro pese a no poder lucirse. Cogió la espada, pero pinchó arriba al primer encuentro. Se puso andarín y gazapón el toro, lo cazo Roca Rey -sin consecuencias- antes de dejar una estocada previa al uso del descabello saludando finalmente una ovación.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de Vista Alegre, Bilbao. Quinta de la Aste Nagusia. Corrida de toros. Casi lleno en los tendidos
Toros de Puerto de San Lorenzo. Correctos de presentación dentro de la seriedad que marca la plaza.
Morante de la Puebla: Pitos y ovación que saludó desde la tronera del burladero
Manuel Escribano: Oreja tras petición y ovación con saludos
Roca Rey: Oreja y ovación con saludos
INCIDENCIAS: La plaza obligó a saludar a la terna tras finalizar el paseíllo, negándose Morante de la Puebla tras el episodio vivido ayer con un aficionado.
FOTOGALERÍA: JOKIN NIÑO
