En el término municipal de El Castillo de las Guardas se encuentra la ganadería sevillana de Toros de al Plata, un hierro de procedencia Torrestrella gracias a la compra realizada por su ganadero a finales de los años 90. Esta ganadería, propiedad de la familia Trapote, está en continua búsqueda del toro que sueñan como ganaderos, y uno de esos puede ser este toro colorado proveniente de una reata importante de la casa.
El problema vino cuando en una pelea sus hermanos de camada le fracturaron la pata derecha, dejándolo prácticamente cojo. Viendo la situación, tanto su ganadero como el veterinario decidieron escayolar al animal para intentar así curar dicha fractura y que el hueso soldase. El problema es que es una finca muy escarpada, de ahí que se tenga al animal en un corral pequeño junto a los bueyes.
Al contrario que las escayolas que se nos ponen a los humanos, ésta es de fibra de carbono, un material más resistente para que no se le rompa, de esta manera se mantiene perfectamente y realiza la función que requería su lesión. Una medida nada usual en el campo bravo por la complejidad de la misma. Según relataba José Luis Diz, veterinario de la casa: «Todo se debe a una pelea con sus hermanos de camada, en el fragor de la batalla le partieron la pata derecha, de ahí que tuviéramos que tomar esta decisión para intentar salvarle la pata».
‘Narrador’, que así se llama el toro, se quedará de semental por el buen comportamiento que tuvo durante la tienta, un toro que habrá que ver si vuelve al cercado de sus hermanos o se opta por dejarlo con los bueyes hasta que esté plenamente recuperado. Ahora, tras suministrarle unos antibióticos, el animal vuelve al cercado con los mansos a la espera de una nueva cura.
Esta ganadería que fue creada en 1997 al amparo del artículo 5 bis b) de los Estatutos de la UCTL al adquirir vacas y sementales de ‘Manolo González’, ‘González Sánchez-Dalp’ y ‘Guadalest’. En 2009, tras lidiar los festejos reglamentarios, pasó a formar parte del Grupo Primero en virtud de los acuerdos tomados por la Junta Directiva de la Unión de Criadores de Toros de Lidia. Una divisa que aún no ha tomado antigüedad en la primera plaza del mundo.
