Morante de la Puebla está decidido a seguir dando pasos adelante este 2023 para seguir potenciando festejos taurinos que parecían olvidados. Para esta temporada tiene como objetivo devolverle a Jerez de la Frontera y Salamanca, dos de sus festejos más tradicionales. Dos corridas concurso que llevan varios años en el cajón y que el diestro de la Puebla del Río querría volver a sacar a la palestra.
Cada plaza tendría su toro, es decir, ganaderías que pasten o tengan una estrecha relación con cada provincia. Tanto Salamanca como Cádiz son dos de las provincias con más ganaderías de bravo, en las cuales se encuentran divisas de gran vitola que tendrían su sitio garantizado en dichos festejos. Así se ha venido publicando en los distintos medios de comunicación estos días atrás. Cultoro avanzaba los hierros del festejo a celebrar en la baja Andalucía, mientras que Javier Lorenzo adelantó en La Gaceta de Salamanca el visto bueno de la empresa que rige los designios de La Glorieta para recuperar esta corrida.
Será una corrida que volvería a poner el foco en las ganaderías de la tierra, más si cabe en una zona eminentemente ganadera donde hay multitud de divisas que soñarían con poder lidiar ese día. Tanto la empresa como los veedores de la misma tienen claro una premisa, la de elegir toros en tipo para un día tan especial, buscar animales que tengan la seriedad que pide una plaza de segunda y las hechuras del encaste del que proceden.
En esto hizo mucho hincapié José Antonio Morante de la Puebla: había que respetar el fenotipo de los hierros seleccionados, algo fundamental para darle sentido a esta corrida concurso. Un torero que desde hace unos años ha dado un paso hacia adelante en la recuperación de plazas, fechas emblemáticas amén de hierros que merecían volver al foco mediático por la importancia que tienen en el campo bravo. Ya puso su granito de arena en Salamanca lidiando dos años consecutivos el hierro de Paco Galache, una ganadería que respondió a las expectativas de forma notable.
Zamora en 2022 y ahora Algeciras apuestan nuevamente por corridas concurso
Morante no ha rehuído de las corridas concurso; sin ir más lejos, el pasado año se anunció en Zamora junto a Daniel Luque y Alejandro Marcos en la lidia de astados procedentes de las divisas salmantinas de Castillejo de Huebra, Montalvo, Loreto Charro, Puerto de San Lorenzo, Valdefresno y Pedraza de Yeltes. Un festejo donde le cortó las dos orejas al segundo de su lote, un exigente animal con el hierro de Puerto de San Lorenzo. Esa tarde salió a hombros junto a sus compañeros, los cuales cortaron una oreja a cada uno de los animales que le cupieron en suerte.
Semanas atrás también se oficializó por parte de Carmelo García la celebración de una corrida muy especial en la plaza de toros de Algeciras, una corrida que unirá a los seis hierros de la familia «Domecq» en un mismo cartel. Torrestrella, Juan Pedro Domecq, Salvador Domecq, Jandilla, El Torero y Lagunajanda serán las que se anuncien en una tarde muy especial para una familia que es santo y seña del campo bravo. Por el momento se desconoce si Morante de la Puebla será uno de los integrantes, algo que no habría que descartar debido a la continua apuesta que tiene el sevillano por este tipo de festejos.
Jerez, la otra apuesta de Morante por la recuperación de una corrida señera en la baja Andalucía
Si su intención en Salamanca es recuperar la corrida concurso con seis hierros salmantinos, en Jerez hará lo propio con otras seis divisas que pastan o han pastado en la provincia de Cádiz. Seis ganaderías estrechamente ligadas a esta tierra, seis hierros con una gran historia detrás, pertenecientes a varias de las casas ganaderas más importantes de la baja Andalucía. Para ello, tanto la empresa como los veedores de la misma han intentado abrir el abanico de encastes buscando animales que sean el fiel reflejo de su encaste, reseñando para ello astados de Juan Pedro Domecq, Carlos Núñez, Fermín Bohórquez, Toros de El Torero, Santiago Domecq y Álvaro Núñez.
Tarifa (Carlos Núñez), Jerez de la Frontera (Fermín Bohórquez y Santiago Domecq) y El Bosque (Toros de El Torero) son los términos municipales que dan cobijo a varios de los hierros que estará presente en esta nueva edición recuperada por José Antonio Morante de la Puebla. De todas ellas hay dos que tienen raíces estrechas con la provincia. La primera de ellas es Juan Pedro Domecq, un hierro que pastó durante gran parte de su historia en la finca Jandilla, un lugar paradisíaco junto a la Laguna de la Janda. Un hierro que en los años 70 cambiaría su cuartel general a la sierra norte sevillana.
Por otro lado, el hierro de Álvaro Núñez tiene su finca principal en Portugal, un terreno donde el ganadero sevillano tiene prácticamente la ganadería entera, salvo los toros que van para corridas, estando estos en una finca muy cerca de la ‘Ruta del Toro’. Amén de pastar los machos en la provincia de Cádiz, Álvaro ha formado parte durante varios lustros del hierro gaditano de Núñez del Cuvillo. Por tanto, los seis hierros seleccionados por la empresa tienen estrechos lazos de unión con la plaza de toros de Jerez y con la provincia de Cádiz.
