Jesús Hijosa, alcalde de la localidad toledana de Villaseca de la Sagra y presidente del Foro de Defensa de las Novilladas, ha vuelto a hablar claro en los últimos días. Lo ha hecho durante una intervención en el Club Cocherito de Bilbao en la que ha expuesto la situación que pasan la gran mayoría de pueblos que ofrecen novilladas con y sin picadores en España y en la que también ha tenido palabras para la Fundación Toro de Lidia: «En la Fundación hay muchos a cobrar de un dinero público que tenía que estar en los festejos taurinos de los pueblos«.
Al llamamiento a la unión del sector para conseguir «la viabilidad de las novilladas en las plazas de tercera y cuarta, algo que sigue siendo el reto pendiente del sector taurino», Hijosa unió la denuncia a la huelga y boicot que la Unión de Picadores y Banderilleros –UNPBE– y la Unión de Toreros –UP– llevó a cabo en la pasada Feria del Alfarero de Oro: «¿Por qué no van a hacer huelga a las plazas que no pagan los mínimos pero sí boicotean y montan una inspección en Villaseca?», se preguntaba Hijosa.
«El Fundi fue a la huelga a la localidad representando a la Unión de Toreros cuando nosotros hemos subido el sueldo a un novillero por encima de un banderillero. Y encima hemos puesto derechos de imagen para que los cobre. Y veo allí a un torero que representa a matadores futuros -novilleros- protestando contra la subida de sueldo de éstos. Pues no entiendo su postura, sinceramente», lamenta el primer edil.
«Si no somos capaces de cambiar el sistema ni hacerlo atractivo, iremos mucho peor»
El problema, según Hijosa, «es que el del mundo del toro es un sector que no tiene ninguna estructura. Viene un resfriado y nos morimos. Hay una crisis pequeña y ha desaparecido la mitad de la producción que hay en este país de toros. No hay una estructura empresarial de cómo tiene que funcionar y de cómo tiene que ser esto; el sector empresarial taurino no ha innovado en los últimos veinte años. Si no somos capaces de cambiar el sistema ni hacerlo atractivo, con toda la oferta de ocio que hay hoy en día, iremos peor», advierte el presidente del Foro de Novilladas.
Y seguía exponiendo sus argumentos: «Ahora mismo, los empresarios ni están ni se les espera, y los grandes aprovechados de esta circunstancia se han encontrado con mucha fuerza. Y, sin embargo, en vez de reducir gastos dicen que hagamos novilladas de cuatro novillos, ¿esa es la solución? ¿Ese es el futuro que proponen? No entiendo nada». Porque, además, desde la UNPBE y la UT «no son capaces de movilizarse, y cuando se movilizan es para hacer una huelga a Villaseca, un Ayuntamiento que ha pagado religiosamente los mínimos. El alcalde de Villaseca no da un paso para atrás ni para coger impulso; yo soy aficionado antes que alcalde, y si lucho por algo, es por la viabilidad. Hay que dar pasos para adelante y no para atrás».
Habla sobre las coacciones a los banderilleros para que no toreasen en las novilladas de Villaseca
El día que torearon la novillada de Jandilla en Villaseca los jóvenes Manuel Perera y Jorge Martínez, «delante de mí, en el apartado de la novillada, llamaron a dos de los banderilleros diciéndoles que o se quitaban o iban a tener problemas. Y los coaccionaron e incluso los increparon en el hotel en Mocejón para que se quitasen», denuncia Hijosa. «Me parece algo bochornoso que no se mire por la tauromaquia en general, sino que solamente se mire por el día de hoy y solamente por la parte del sector a la que cada colectivo representa». Por eso «cuando alguien levanta la voz e intenta denunciar todo este abuso de poder y de imponer criterios, no interesa. Han negociado unos convenios colectivos durante estos años que hacen inviables los festejos».
Sobre los derechos de imagen de los banderilleros
Uno de los problemas de la huelga de Villaseca fueron los derechos de imagen: «El convenio que firmó el Foro con ASPROT recogía que a las 12 de la mañana cada profesional cobraría con un cheque nominativo su sueldo y su derecho de imagen. El tema de los derechos de imagen viene de 2012 aproximadamente, cuando solamente existía la UNPBE y solamente ellos cobraban los derechos de imagen. Ellos fueron hábiles y metieron al ayuda y al mozo de espadas para cobrar derechos de imagen. Y ahí está el alguacilillo, los mayorales, los areneros… que no cobran derechos de imagen. Pero ellos tienen la fuerza, lo impusieron y ahí lo tienes«, exponía Hijosa.
Otro de los problemas de los derechos de imagen «es cuando varios banderilleros se separan de la UNPBE y crean otro sindicato, que es ASPROT. Y también se separan los mozos de espadas. Ahora son tres a repartir los derechos de imagen. La Unión y los mozos de espadas siguen cobrando, pero a ASPROT no le pagan. Y si querías que ASPROT cobrase, el empresario o gestor tenía que pagar dos veces los derechos de imagen, a los de la UNPBE y a los de ASPROT -porque los primeros se quedaban todo el dinero-. Y esto se sigue manteniendo: para ahogarles sindicalmente, no quieren que ASPROT cobre y por ello se quedan ellos todo el dinero. Nosotros hacemos una rebaja del 35% de los derechos de imagen, pero con una condición: en vez de pagar al jefe de cuadrillas, para que no haya ningún fraude, lo hacemos directamente con cada banderillero a través de un cheque nominativo«, indicaba el alcalde.
Habla de la Fundación Toro de Lidia y las novilladas
Por último, Hijosa habló de la Fundación Toro de Lidia: «El festejo popular es una de las cosas que engancha a mucha gente. Anima a muchas personas a conocer el mundo del toro y luego acercarse a las plazas. Y si no somos capaces de mantener viva esa llama, mal vamos. El pueblo que deja tres o cuatro años de dar toros, no es fácil que los recupere.Y luego, en este campo, está el tema de la Fundación, que ha pedido un dinero público que es de los festejos taurinos de los pueblos. El dinero que dan a la Fundación es de ellos porque las comunidades autónomas se deben a sus pueblos. Y si alguien lo quiere hacer, tienen que ser los pueblos, no a una entidad que solamente crea intereses. Porque hay veedores que cobran, hay empresarios que cobran por hacer los festejos…», enumeraba el presidente del Foro.
«La Fundación Toro de Lidia nació con un espíritu súper importante de aunar esfuerzos, de hacer una unión de todos los sectores, de intentar no vincularse a unos y a otros… y ahora, junto a ella, ha sido ANOET el mayor empresario que ha dado toros en España con dinero público y yendo a hacer montajes a plazas donde realmente no van a tener ningún futuro, no tiene validez. Es mejor dárselo a los Ayuntamientos para que mantengan los espectáculos, porque realmente los espectáculos para que perduren en el tiempo tienen que echar raíces en los aficionados. Y si no lo montan los aficionados ni los pueblos, los festejos y las novilladas no tendrán validez», exponía por último Hijosa.
