Si hay un hierro especial para el aficionado torista ese es el de Samuel Flores, y si una noticia lo alegró de verdad el pasado mes de noviembre fue el anuncio de que esta mítica ganadería albaceteña volvería a estar anunciada en la Feria de San Isidro 2022. La pasada temporada, acuciado por diversos factores motivados por la pandemia, Samuel Flores tomó una drástica decisión y mandó parte de sus toros al matadero por no estar dispuesto «a venderlos por 1.000 euros», como así reconoció en una entrevista a este medio. Pero ahora, el criador bravo manchego lanza un mensaje de esperanza: tiene dos imponentes corridas listas para Madrid y Albacete para la próxima campaña taurina.
Para el ganadero albaceteño la afición no flaquea, sino todo lo contrario: la ilusión por volver a entrar en el circuito de las grandes Ferias le hace ser optimista en lo que se refiere a la temporada de 2022 y las próximas. Sabe que tiene depositada en sus manos una tradición y una dotación genética extraordinaria, única, y por lo tanto no podría privar de ella al público. Samuel Flores es, sin duda, una joya genética que se cría en El Palomar y que hace de sus Gamero Cívicos algo único.
La esperanza llega a El Palomar tras un aciago 2021
En 2021 tuvo que enviar gran parte de sus toros que estaban listos al matadero, principalmente por la falta de plazas de envergadura abiertas y por el bajo precio que se ofertaba para llevarse sus animales, pero ahora la cosa pinta diferente en esta temporada que se avecina.
Según el propio Samuel Flores ha confirmado esta semana a nuestro compañero Pedro Belmonte, de La Tribuna de Albacete, en sus cercados aguardan varias corridas de toros además de las de Madrid y Albacete: «La de Las Ventas es espectacular, que es lo que quieren ver, con mucha cara y trapío. Ya está seleccionada y vista por la empresa«, expone el ganadero al citado medio. También explica que tiene una corrida «muy cornalona» para una corrida en la localidad abulense de Sotillo de la Adrada y otro toro para una corrida concurso de ganaderías.
En la actualidad con tres hierros, los cuales irán a cada uno de sus hijos. El de Samuel Flores para su hijo Samuel, el de Manuela Agustina López Flores a su hija Isabel; el cual ya está cambiado en la UCTL y el de Castillo de Montizón para su hijo Carlos. Los tres hierros, tras una reducción pensada y pausada, se quedaron con unas 70 vacas cada uno de ellos.
Samuel Flores: «Tengo entre diez y doce toros listos para llevar a Madrid, siempre que no se inutilicen»
A la hora de hablar de su ganadería explica por qué no se rindió si se echó a un lado: «Seguiré mientras pueda con la ganadería, no solamente por la afición, que por supuesto la tengo, sino que si flaquease, pesa sobre eso el recuerdo a mis antepasados y el saber que tengo depositado en mis manos una dotación genética extraordinaria». Samuel es un hombre con los pies en el suelo, sabe lo que tiene y en el momento que está, por ello lucha a diario porque su ganadería vuelva a esas plazas en las que nunca debió salir.
«Tengo entre diez y doce toros listos para llevar a Madrid, siempre y cuando no se peguen ni se inutilicen en los próximos meses«, añadía en la citada entrevista a Belmonte. Sin duda una gran noticia para todos los aficionados. Decir Samuel Flores es también decir ASPRONA, festejo en el que triunfó en innumerables ocasiones. Es su plaza, su afición, su tierra, por lo que el sueño de volver es algo que le ilusiona tremendamente. «Empiezo a lidiar en serio de nuevo«, comentaba el genial ganadero.
Volver a levantarse es una constante en la carrera de este ganadero, que ya sabe lo que es caerse y volver a resurgir, por lo que la pandemia no iba a ser óbice para que Samuel sacara esa raza que lleva tanto él como sus toros en la sangre y volviera al circuito: «Sufrí tres baches gordos en mi vida como ganadero: en el año 1967; uno posterior provocado por la tuberculosis, fruto del cual debió dejar las 340 vacas existentes en solamente 115; en tercer lugar, el de la infertilidad, que lo arrastra desde hace un lustro por un fallo del antiguo mayoral, y ahora uno último por culpa de este COVID que tanto daño nos hizo», decía en palabras a este medio hace dos meses.
