ASPROT presentó ayer en la Fiscalía de Madrid una denuncia por las coacciones que sus profesionales están teniendo en los últimos días para impedir que actúen en otros festejos en diferentes ferias a raíz de haber toreado en Villaseca de la Sagra. “A partir de dichas acciones judiciales, a todo el que tenga pensado seguir cometiendo esos abusos delictivos contra otros compañeros no le saldrá gratis”, indican desde la asociación.
Este es el comunicado íntegro con el que la asociación anunciaba la denuncia:
La Asociación ASPROT ha acordado poner en conocimiento del Misterio Fiscal concretamente ante la Fiscalía de la Audiencia Provincial de Madrid los hechos acaecidos en la localidad de Cadalso de los Vidrios el pasado día 18 de septiembre donde un banderillero afiliado a nuestra asociación ASPROT fue coaccionado por algunos profesionales participantes en dicho festejo, instándole a que abandonase su puesto de trabajo.
El único motivo que alegaban para impedir que pudiera torear esa tarde era que este banderillero no afiliado a la Unión Nacional de Picadores y Banderilleros Españoles había decidido torear unos días antes en las novilladas celebradas en Villaseca de la Sagra (Toledo), donde decidió ejercer su legítimo derecho a actuar como también lo hicieron otros compañeros picadores, banderilleros y Mozos de espadas por no estar de acuerdo con los motivos de fondo que motivaron dicha huelga.
Ante tales circunstancias y presiones recibidas por nuestro representado, encontrándose en su habitación del hotel, después de comer y con el vestido montado en la silla para actuar, tuvo que abandonar y dejar su puesto de trabajo para evitar males mayores.
Igualmente han sido denunciados otros casos similares al anteriormente expuesto en los que por el mismo motivo (no haber respaldado la huelga) en las novilladas del Alfarero de Oro, otros subalternos de esta Asociación denunciada UNPBE decidieron coaccionar a nuestros representados que también habían actuado en la feria de Villaseca de la Sagra. Valiéndose para cometer estas coacciones ilegales de su mayoría numérica en los festejos referidos.
Esta Asociación Sindical de profesionales taurinos considera que estos hechos constituyen infracción criminal por delitos contra los derechos de los trabajadores y por coacciones.
Firmado: ASPROT
Así sucedió el episodio de acoso en Cadalso de los Vidrios
El acoso y la presión a los novilleros y subalternos que tomaron parte en la Feria de novilladas de Villaseca de la Sagra prosigue. Este mismo fin de semana, un subalterno tuvo que quitarse del cartel que toreaba por la tarde en la localidad madrileña de Cadalso de los Vidrios por las presiones sufridas por la mañana por parte de otros toreros de plata. Y lo más grave es que uno de los compañeros que presionó subió ese mismo acoso a redes sociales, jactándose de que se tuviese que ir del lugar sin poder ejercer su libre derecho al trabajo: ASÍ SUCEDIÓ TODO.
El de Cadalso, un hecho que no es aislado
Otro de los nombres represaliados por torear en Villaseca es el del banderillero José Otero, miembro también de ASPROT y que se ha tenido que desmonterar hasta en seis ocasiones en el coso de La Sagra en los seis paseíllos que ha hecho por sus destacadas actuaciones.
El propio Otero denunciaba a través de las redes sociales la pasada semana que «tenía otras corridas y me han quitado. Algunos novilleros con los que fui en Villaseca torean en Madrid y en otros sitios y no me pueden poner. Así que creo que esta temporada ya se me ha acabado…». Otero iba a hacer el paseíllo en la corrida de toros de Madridejos (Toledo) y en Andorra (Teruel) y finalmente no ha actuado.
La Fundación Toro de Lidia, que también está involucrada en el comunicado de la UT, aún no se ha pronunciado al respecto
La Fundación Toro de Lidia no se ha pronunciado por el momento sobre estas amenazas de la UT, la UNPBE y ASNAME la a los novilleros que han toreado en Villaseca de la Sagra durante su Feria del Alfarero de Oro. El pasado 5 de septiembre, estas tres entidades enviaron un comunicado en el que amenazaban a los novilleros que estaban anunciados en el Alfarero de Oro y que no se quitasen del serial. En él, involucraban a la Fundación Toro de Lidia, ya que anunciaban como represalia que los novilleros que finalmente tomasen parte de la Feria no torearían los Circuitos de Andalucía, Castilla y León, Comunidad de Madrid y del Norte. Ante eso, la Fundación Toro de Lidia decidió no pronunciarse.
Todo ello ocurre después de que un centenar de banderilleros y picadores, encabezados por El Fundi intentasen aquel citado día sabotear y suspender la primera de las seis novilladas del abono sagreño. Y lo hicieron desoyendo la prohibición de la subdelegación del Gobierno, que impedía celebrar esta manifestación que protestaba contra el convenio firmado por los miembros del Foro de Promoción y Defensa de las novilladas para la viabilidad de estos festejos en los pueblos. Finalmente solamente fueron tres los novilleros que decidieron apoyar el boicot: Alejandro Mora, Manuel Diosleguarde y José Fernando Molina.