Durante este último año, se habló largo y tendido sobre las ganaderías que debían estar esta temporada en la Maestranza a lo largo de su abono. Tanto aficionados como empresa y toreros estaban de acuerdo en poder traer un hierro de la importancia de La Quinta, así como volver a darle una oportunidad tras el buen resultado de los últimos años a ganaderías como El Parralejo o Santiago Domecq.
Ramón Valencia también apostó, conjuntamente con Morante, en volver a comprar una corrida del hierro gaditano de Torrestrella, una ganadería de gran importancia en el campo bravo y que volvía a un cartel de figuras tras varios años encajado en otro tipo de combinaciones. También por expresa petición de Morante se puso sobre la mesa la ganadería de Álvaro Núñez, hierro de reciente creación que no pudo debutar en La Maestranza por falta de toros.
Por tanto, el hierro afincado en tierras portuguesas podría tener la oportunidad de hacer su presentación el año venidero en una plaza donde ya ha triunfado como ganadero cuando llevaba las riendas junto a su padre de la divisa familiar de Núñez del Cuvillo. Sin duda un paso importante para un ganadero que estuvo presente en varios de los acontecimientos de la pasada temporada y que sirvió para ver los primeros pasos como criador en solitario del sevillano.
Pero mientras que nos centramos en estos dos hierros, hay otro que anda tapado y que podría regresar al Baratillo tras más de treinta años sin hacerlo -su última corrida completa nos retrotrae hasta los años 80-: una divisa que lleva trabajando en silencio de forma encomiable durante muchos años, siendo un hierro santo y seña del campo bravo sevillano que ya ha lidiado en plazas de enorme importancia y con éxitos importantes. Hablamos de la ganadería de Luis Algarra, esa que no ha perdido el sello marcado desde su creación pese a las exigencias del mercado. Tras el fallecimiento de Luis Algarra Polera en febrero de 2006, su hija Aurora tomó las riendas de la ganadería tras llevar toda una vida junto a su padre. Con el paso de los años aquella decisión de dar un paso adelante y dejar a un lado el vértigo de hacerse cargo del hierro familiar le ha dado los frutos que buscaba. Tras más de 16 años al mando de la divisa morada y blanca está en un punto óptimo para dar el paso definitivo y anunciarse en su plaza, esa que no es otra que la Real Maestranza de Caballería de Sevilla. Recordamos que el último astado que lidió en este ruedo fue un novillo en la encerrona como novillero de Lama de Góngora hace ya más de un lustro.
Ramón Valencia: «Llevo años intentando traer una corrida de Algarra, pero entiendo que a ellos les resulte difícil dar el paso»
«Llevo años intentando traer una corrida de Algarra, pero entiendo que a ellos les resulte difícil dar el paso, es su plaza y es una responsabilidad tremenda. Aurora me comentó que para el 2023 podía traer una corrida ya que la camada es propicia para ello. Por lo tanto, si Dios quiere hay muchas opciones para que este hierro esté en el abono del año que viene, ojalá por fin den el paso, las puertas siempre las tuvieron abiertas«, comentó el propio Ramón Valencia en la presentación de la temporada taurina en el coso del Baratillo allá por el mes de febrero. Ahora queda en manos de Aurora Algarra dar ese paso y no dejarse llevar por el vértigo, ese que dejó a un lado hace 16 años para tomar los mandos de la ganadería que su padre había puesto en figura.
Juan Pedro Domecq con tres corridas, Hermanos García Jiménez y Victoriano del Río con dos, Garcigrande-Domingo Hernández, Jandilla, Santiago Domecq, Núñez del Cuvillo, Torrestrella, El Parralejo, Victorino Martín y Miura, así como San Pelayo para rejones fueron las divisas que estuvieron presentes en el abono de 2022.
Pagés es una empresa poco amiga de los cambios drásticos, es más de seguir una línea continuista y conservadora, de ahí que normalmente no se cambie de un plumazo un buen número de hierros de un año para otro, algo que no sería necesario si se reducen esos dobletes o tripletes de algunas divisas para dar cabida a otras. Sea como fuere este año habrá cambios importantes y una reestructuración de las corridas a lidiar, algo que venía demandando el aficionado desde hace tiempo.
Por lo tanto, este 2023 puede haber cambios sustanciales en el elenco ganadero de cara a un año en el que el aficionado tiene puestas muchas esperanzas. Hierros como Luis Algarra, La Quinta o Álvaro Núñez pueden tener su cabida en el abono, para ello tendrían que salir algunas de las que estuvieron anunciadas el pasado año o reducir el triplete de Juan Pedro o los dobletes de Victoriano del Río y García Jiménez. Por otro lado, la inclusión de los hierros de Garcigrande y Domingo Hernández, una vez realizada la división tras la herencia familiar, dependerá de las exigencias de los espadas de primera fila a la hora de cerrar sus contrataciones, de ahí que la empresa pueda plantearse comprar uba corrida de cada hierro o decantarse por una de las dos.