ZARAGOZA

Simón Casas, sobre el nuevo pliego-subasta de Zaragoza: «Es un mercadillo sin ningún criterio taurino»


lunes 3 enero, 2022

El que fuese empresario del Coso de la Misericordia de Zaragoza, Simón Casas, da declaraciones sobre el nuevo pliego-subasta al que será sometido el coso por parte de la Diputación Provincial.

Simon Casas Zaragoza
Simón Casas. © SCP

La Diputación Provincial de Zaragoza ha publicado este lunes las bases del concurso de arrendamiento de la plaza de toros de La Misericordia de la capital aragonesa para las cuatro próximas temporadas, un pliego-subasta con un canon mínimo anual de 182.593 euros de partida. Un pliego que el productor Simón Casas, en la actualidad al frente de cosos como Madrid, Nimes, Béziers, Albacete o Alicante, califica como «mercadillo sin ningún criterio» hablando expresamente desde el punto de vista personal, meramente como empresario independiente.

«Cuando tocan de verdad al alma de la Fiesta y a su futuro, hablo individualmente», comienza exponiendo, dejando claro que «lo único que anima la savia de mis palabras es el amor a la Fiesta». El que fuese empresario de Zaragoza, encontrándose el coso en un estado poco agraciado en cuanto a público, vuelve a poner de manifiesto que no habla «de forma polémica ni ofensiva», sino «exponiendo la realidad; de hecho, he ganado el concurso en Zaragoza y he remontado la plaza siempre yendo a favor de los intereses de la tauromaquia, nunca en contra, y por eso no me presentaré de esta forma», adelanta Casas.

«Le he dedicado toda mi vida a la tauromaquia, tengo mis convicciones, y al contrario de mucha gente del toro, si alguien me pregunta sobre el pliego de Zaragoza digo claramente lo que pienso por amor a la Fiesta y por llamar la atención a una toma de conciencia«, señala Simón. «Si desaparece algún día el toreo no será por culpa de los antitaurinos, sino por asfixia económica», argumenta.

Simón Casas: «La tauromaquia o es arte y cultura, o desaparece»

Toros Zaragoza

«Cuando un arte o una cultura no tiene los medios económicos necesarios para creatividad artística y cultural, tiene que desaparecer porque sin economía no hay arte. Detrás de la literatura, hay una economía de editores; detrás del teatro u ópera, hay una economía de producción; detrás del cine, hay una economía de producción del arte del cine. La economía de la producción de la tauromaquia está así por culpa de los propios empresarios, pero también por culpa de algunas instituciones como la Diputación, que hacen un mercadillo para conceder una plaza de toros sin ningún criterio», defiende Simón Casas.

«La tauromaquia o es arte y cultura, o desaparece», añade el productor. «Y si es arte y cultura, tiene que tener una economía de producción sostenible, y para ello, se tienen que conceder las plazas de toros como se conceden todos los espacios culturales del ballet o del teatro. Eso es una evidencia. Los que no entienden eso son estúpidos, son ciegos», defiende Casas. «Sin economía coherente, no hay arte que se sostenga«, argumenta.

«Si yo no estoy en la Fundación, por algo será»

Y habla sobre el no pronunciamiento, por el momento, de la Fundación Toro de Lidia de hechos como el de la Diputación de Zaragoza: «Si yo no estoy en ella, por algo será«, señala. «Tiene visiones interesantes a tener en cuenta, pero está jugando en solitario con dinero ajeno. No creo que la solución de la economía de la tauromaquia pase por subvenciones, sino por convicciones fuertes y tajantes y, en este arte que es el del valor, muchas veces me da mucha pena que el valor que sí está en el ruedo, sea cobardía del callejón para arriba», concluye Simón Casas.