Hace unos días, el ganadero Javier Núñez, propietario del hierro gaditano de La Palmosilla, exponía en la redacción de Cultoro la problemática a la que se enfrentan muchos ganaderos con la subida del precio de los piensos. La bajada de precio de los toros debido a las restricciones de aforo que la pandemia había traído consigo en las plazas, la subida del precio de la luz y de los piensos estaban llevando a los criadores de toros de lidia a crear nuevas fórmulas para intentar sostener sus negocios, y una de ellas era la posibilidad de alimentar a los toros bravos con orujo de aceituna, uva o incluso cítricos, una alternativa que Núñez exponía. Pero, nutricionalmente hablando, ¿qué perjuicios o beneficios tiene en el toro de lidia?
Le hemos preguntado a José Luis Algora, veterinario y representante de la ganadería de Partido de Resina, que nos ha desgranado esta problemática de la subida de los costes de producción y las posibles soluciones para aminorar los costes que tienen que asumir los ganaderos a la hora de alimentar toros bravos.
En Partido de Resina, por tratarse de un toro muy particular, las cosas hay que hacerlas con sumo tacto, un paso en falso podría poner en jaque a una ganadería en peligro de extinción. A la pregunta de si en su casa han modificado el tema de la alimentación nos es claro y tajante: «Nosotros no, aquí seguimos dándole el heno que sacamos de casa a las vacas, en ese sentido no se cambió nada. Y en los toros más de los mismo. Desde mi punto de vista no era necesario ese cambio«.
Le cuestionamos si sabe de algún ganadero que lo hiciera: «En otras casas me consta que sí se está haciendo; en unas se optó por la pulpa de naranja, en otras por la levadura de cerveza… pero eso te hablo para las hembras, a los machos todo el mundo le sigue echando pienso».
La distribución de los piensos en el toro bravo, más rentable según José Luis Algora que la del orujo
Respecto al tema de los costes José Luis nos habla que la diferencia al final no es tal: «Más barato es, eso no te lo voy a negar, es más económico, un poco más, pero al final las cuentas son similares. El ahorro de materias primas puede ser en torno al 25%-30% si decides alimentar a los animales con levadura de cerveza por ponerte un ejemplo, pero a eso tienes que sumarle otros gastos como el personal, el gasoil… Date cuenta que el unifeed tiene que estar un rato haciendo la mezcla, y eso es un gasto, y más al precio que está el gasoil hoy en día. De la otra forma en 15 minutos con un Land Rover alimentas los animales, de la otra forma es más lento y desde mi punto de vista no más barato».
José Luis es un veterinario que también trabaja para otras explotaciones en las que la forma de alimentar al ganado varía, su experiencia es un grado para estos temas: «Muchos ganaderos con los que trabajo me acabaron haciendo caso. Un paquete de heno son 300-350 kilos de los cuales me dan para alimentar a un lote de vacas durante dos o tres días. En esos días no hay que darles de comer, con lo que el personal puede dedicarse a otra cosa. Si solo miras los números puedes pensar en cambiar a una alimentación más barata, es verdad que te ahorras unos 80-90€ al día, pero el coste real no es ese hay que sumarle todo lo que te comenté anteriormente. Al final la gran mayoría vuelve atrás y se quitan de líos».
Por lo tanto, desde el punto de vista nutricional, este veterinario deja claro que no hay problemas graves en cuanto a la alimentación del toro bravo se refiere, pero sí en cuanto a la distribución. Aconseja, por tanto, el uso del pienso.