Hablar de El Pilar es hacerlo de uno de los hierros más reconocidos del campo bravo salmantino y que lidiará una de las dos primeras corridas de toros del año en Las Ventas, en concreto el próximo 17 de abril, Domingo de Resurrección, además de otro encierro en la Feria de San Isidro. Una casa ganadera de enorme tradición, que ha conseguido consagrarse como uno de los hierros de mayor importancia del campo bravo español y que, año tras año, lidia encierros de gran nota.
El Pilar volverá a las Ventas tras dos temporadas en blanco, en lo que a esta plaza se refiere. Estaba anunciada para el Domingo de Resurrección de 2022, así como en las quinielas para una segunda tarde en San Isidro, pero la pandemia dejó sin temporada a los aficionados. Ya en 2021 con la reapertura de la plaza se especuló con que un encierro de esta divisa lidiase en Madrid, pero finalmente no se dio el caso, teniendo que esperar a esta temporada que poco a poco va tomando cuerpo.
La última tarde de El Pilar en Las Ventas, el 21 de mayo de 2019
El hierro de El Pilar es marca registrada en Las Ventas. En casa de la familia Fraile, además del de El Pilar, se encuentra el de Moisés Fraile, cada uno con una procedencia distinta; uno rama Raboso y el otro Atanasio, y los dos son seña de identidad en el coso de Madrid
La última vez que El Pilar lidió en las Ventas fue el martes 21 de mayo de 2019, y el cartel estaba compuesto por Juan del Álamo, José Garrido y Gonzalo Caballero. En dicho festejo el salmantino Juan del Álamo dio una vuelta al ruedo y en la que fue corneado de gravedad Gonzalo Caballero tras cuajar en su muleta al animal de mayor nobleza de un encierro que sacó carácter. Este año vuelve para reafirmar todo ese trabajo que se hace día a día en el campo.
Su temporada 2021 así lo atestigua; nueve festejos, en los que se le dio la vuelta al ruedo a un toro lidiado por Esaú Fernández en Mocejón (Toledo), y en el que se le perdonó la vida a ‘Alambrisco’ nº134 lidiado por el peruano Joaquín Galdós en Tobarra (Albacete). En la única corrida de primera que lidió, Álvaro Lorenzo y Ginés Marín pasearon sendas orejas de los dos últimos astados de la tarde.
En 2020 pudieron lidiar once animales, uno de los cuales fue premiado con la vuelta al ruedo en Camas (Sevilla), festejo pre pandémico en el que se encerraba en solitario Esaú Fernández. Ya metidos en pandemia, fue indultado ‘Potrico’ nº69 por Joaquín Galdós en la plaza de toros leonesa de Astorga, sin duda la mejor noticia de un año tan aciago para los ganaderos de bravo. El otro festejo lidiado por esta divisa fue la novillada de la reconstrucción en Herrera del Duque.
